En un rincón tranquilo de la ciudad, se encuentra Toñito, un niño de seis años con una sonrisa tan brillante como el sol de la mañana.  Toñito, tiene autismo, un viaje interno que lo lleva por caminos diferentes a los nuestros, pero igualmente maravillosos.

A través de sus ojos, vemos un mundo lleno de desafíos, donde la empatía y la comprensión son clave. Su viaje en el autismo es un recordatorio de que la diversidad es lo que hace que nuestro mundo sea tan hermoso, y que cada persona, independientemente de sus diferencias, tiene un lugar especial en él. 

Toñito comienza su día  con la suave luz del amanecer entrando por su ventana, y lo acompaña en un mundo lleno de posibilidades. Para él, cada día es un lienzo en blanco, listo para ser llenado con colores vibrantes y emociones puras. Toñito ve el mundo de una manera especial. Para él, las cosas pequeñas son las más grandes: una hoja que cae lentamente de un árbol, el sonido de un pájaro cantando en la distancia, o la sensación reconfortante de un abrazo cálido. Cada uno de estos momentos es un tesoro que almacena en su corazón.

 

A medida que avanza el día, Toñito se sumerge en sus intereses, que son tan únicos como él mismo. Le encanta la música, y cuando escucha una melodía, su rostro se ilumina con una alegría contagiosa. También disfruta armando rompecabezas, encuentra satisfacción en la complejidad y la belleza de cada pieza encajando en su lugar. 

Pero no todos los aspectos del mundo de Toñito son fáciles. A veces, las luces brillantes y los sonidos fuertes pueden abrumarlo, haciendo que se sienta ansioso y perdido. En esos momentos, su familia y amigos están ahí para él, para guiarlo suavemente de regreso a la calma y la seguridad.

En un día como hoy, reflexionemos sobre estos seres especiales y en cómo iluminan un mundo tan perturbado por el ruido exterior. Dediquemos un momento a meditar y conectarnos con nuestro YO interior, buscando dentro de nosotros los regalos maravillosos que cada día nos ofrece.

 

 

 

                                                                                 ¡ El Vuelo Continúa !